miércoles, 18 de agosto de 2010

13,99 € – Frederic Beigbeder


ED. Anagrama // 272 pág.

13,99 € es también el precio del libro. Beigbeder es maleducado, egocéntrico, listo y guapo. Es publicitario. La primera frase del libro es; “Escribo este libro para que me despidan y me paguen mi indemnización millonaria”.

Sería injusto decir que la vida de los publicitarios es como el autor la dibuja en este libro, aunque no es descabellado pensar que hubo un tiempo, durante el boom de la publicidad, que quizás sí lo fue. Frederic Beigbeder escribe este libro con muchos tintes autobiográficos, como la vez que le explotó la nariz después de esnifar tanta cocaína en los lavabos de la oficina mundial de Danone en París, y en vez de limpiarse y desaparecer sin hacer ruido, se dedicó a pintar con su sangre todo el lavabo y largarse de la reunión sin avisar a nadie.

Creativo de renombre cuenta como despilfarra el dinero de los clientes, tanto él como la agencia para la que trabaja(ba). Nos subimos al último tren de la publicidad excesiva, dónde los clientes sólo sabían asentir como asnos a cualquier cosa que se les propusiera, nos subimos a este tren para olvidar en lo que se ha convertido ahora el sector; trabajo de oficinista, copiar a la competencia y cuadrar balances. La publicidad ya no será nunca como la que él describe. Sólo nos queda esperar que vengan tiempos mejores.

Hasta entonces pues.

No hay comentarios:

Publicar un comentario