Los Soprano forever – Varios Autores

ED. Errata Naturae // 163 pág.

Tony Soprano es para mí como aquel tío que nunca tuve. Aquel que te llevaba al partido de fútbol los domingos o te sacaba de casa cuando eras adolescente para irte a tomar una cerveza. Hombre pasional y sincero, amante y marido, ávido de vida, de tranquilidad, de familia, capaz de todo por sus hijos y amigos. Débil con las sutilezas y fuerte con las mareas, su personalidad entraña todo lo bueno y lo malo de los machos alfa. Lo bueno y lo malo de ser pasional. Pero también lo bueno y lo malo del poder, de las intrigas, de la lealtad. Del miedo.

Este libro es sobre Los Soprano; serie de culto, hito en la historia de la televisión. Un clásico de nuestro tiempo. Unas vidas que cobraron realismo, unos personajes que se fundieron con nosotros. Los Soprano forever trata de acercarnos todo aquello que hay tras la pantalla, cuando se funde a negro cada capítulo ¿qué es lo que queda?

Es un libro sobre Los Soprano y nuestra simpatía por el diablo, por Dios, las mujeres, el sexo, la paranoia familiar, la soledad multitudinaria, el nihilismo, el psicoanálisis al que se somete semanalmente, el bienestar infeliz y sobretodo, su oscurísimo final, su tremenda última escena; la nada.

¿Hay mejor forma de terminar que con una frase de Tony Soprano? No. Ahí va: “Soy un gilipollas miserable. Lo dije desde el primer día… Todo este jodido conocimiento de uno mismo ¿dónde cojones me ha llevado?... Venga ya. Soy un puto maleante gordo de Jersey”.